Operacion rinoceronte
Posted on May, 30 2003
Cómo — y, más importante, por qué — se están trasladando a diez rinocerontes a través del Nepal. Sigamos a una madre y su cría por un día para averiguarlo.
"¡Rino uno a rino dos!"
A medida que se repite la llamada a través de los radios hechas por los técnicos montados en elefantes, la gigantesca bestia se pone tensa, y yergue la cabeza. Su cría está en pie a su lado, nerviosa. El portador del rifle apunta y da perfectamente en el blanco en la grupa de la madre, perforando su blindaje e inyectando un tranquilizador, M99, (etorfina hidroclórico). Diez minutos después la cría recibe su disparo. Ambos animales quedan dormidos en minutos.
Son las 9:30 de la mañana y comienza un largo día y una larga noche para los rinocerontes. Ambos serán llevados al Real Parque Nacional Bardia de Nepal, unos 300 kilómetros al oeste de su actual morada en el Real Parque Nacional Chitwan.
A primera vista, parece extraño que se esté moviendo rinocerontes saludables y aparentemente contentos, a través del país — sin mencionar el peligro. Pero la operación es parte del muy exitoso programa de conservación de rinocerontes del Nepal.
A fines de los 1960, quedaban menos de 100 de los grandes rinocerontes de un solo cuerno (Rhinoceros unicornis) en el Nepal. Gracias a proyectos conservacionistas desarrollados por la Fundación para la Conservación de la Naturaleza Rey Mahendra, al Departamento Nepalés de Parques Nacionales y Conservación de la Vida Silvestre del Gobierno de su Majestad, a la Red de Conservación de la Biodiversidad, y al WWF, el Nepal es hoy el hogar de más de 600 rinocerontes, y el Real Parque Nacional Chitwan tiene la segunda población más grande de rinocerontes en el mundo.
Pero el éxito ha tenido sus conflictos. A medida que la invasión natural de árboles disminuye el hábitat de pastos, la creciente población de rinocerontes compite cada vez más con los humanos. Los animales han destruido siembras y han causado víctimas humanas, frecuentemente conduciendo a acciones de represalia por parte de los granjeros afectados.
Y aunque la población ha aumentado, siguen siendo vulnerables.
"En 1986, en el Nepal solamente se encontraban rinocerontes en el Real Parque Nacional Chitwan", explica Shyam Bajimaya, Coordinador del Equipo de Traslado y jefe ecologista del Departamento Nepalés de Parques Nacionales y Conservación de la Vida Silvestre. "Una sola epidemia, o un brote masivo de cacería ilegal, podría tener resultados catastróficos. Necesitábamos, y seguimos necesitando, trasladarlos para establecer poblaciones viables en otros sitios para evitar su extinción en el Nepal."
Por esta razón, se está trasladando la madre y su cría a Bardia, en donde gradualmente a través de los últimos 17 años, se ha creado una población de rinocerontes.
Con la madre y su cría dormidas, el Dr. Shanta Raj Gyanwali, director del Equipo Técnico de Traslado, se apea de su elefante, tapa los ojos de los rinocerontes con una tela, y comienza sus preparaciones. Ahora el tiempo es esencial, pues el veterinario desea que los animales permanezcan dormidos el menor tiempo posible. Se excava una fosa a pocos centímetros de las bestias, los técnicos toman numerosas medidas — largo, temperatura, patrones de respiración y otras estadísticas vitales. Rápidamente se sujeta un collar radiotransmisor a la madre.
Cuando las fosas están listas, se les colocan sendos trineos y se ruedan los rinocerontes en ellos — se requirió 20 hombres para mover a la madre. Luego un tractor hala a los trineos hasta dos camiones con huacales especialmente diseñados.
Justo antes de cerrar las compuertas de los huacales, el veterinario administra un antídoto. La madre se agita, gruñe y se pone en pie, imitada por su cría en el otro camión. Son llevados a un lugar fresco y sombreado para esperar el viaje nocturno al Real Parque Nacional Bardia.
Se transporta a los rinocerontes de noche porque es más fresco — un rinoceronte acalorado podría ser un problema si se traslada bajo efectos de un sedante. Además, hay menos tráfico de noche lo cual permite un viaje más rápido en las serpenteantes carreteras de montaña, frecuentemente imprevisibles.
A las 4 PM. comienza el largo, lento e incómodo viaje. Por las próximas 15 horas los rinocerontes viajan en un camión Tata verde y azul, decorado con estrellas, escenas de montaña, oropel multicolor e íconos hindúes.
A lo largo de la carretera hay constantes recuerdos de la insurgencia maoísta. Afortunadamente, ha existido una tregua desde hace 3 meses y han disminuido las tensiones, pero los puntos de chequeo del ejército siguen en alerta. Para los rinocerontes, es menos el problema pues el ejército ha recibido aviso anticipado y ondean banderines rojos de los espejos laterales del Tata para indicar que se lleva carga muy especial
Finalmente, los rinocerontes llegan al Real Parque Nacional Bardia en el Valle Babai, en donde se suelta primero a la madre. El camión retrocede hasta un sitio especialmente designado, el veterinario hace un chequeo final y deja los procedimientos al personal del parque.
Se levanta la compuerta y el animal sale reculado, resoplando a sus "captores", antes de desaparecer en la jungla en una nube de polvo.
El camión con la cría toma el lugar del vehículo vacío. Se quiere soltarla lo antes posible para que pueda reunirse con la madre.
Pero ella tiene otras ideas.
Desde lugares seguros en árboles y encima de los camiones, contemplamos mientras se levanta la compuerta y esperamos.
Y esperamos. . . .
Y esperamos. . .
Finalmente, un miembro del equipo se apea del camión y se asoma dentro del huacal: ¡la cría está profundamente dormida! Y, tras una noche tan larga y estresada, parece no tener intenciones de despertar.
El hombe le lanza unas ramas, pero sin resultado. Finalmente, tras arrojarle otros ítems contra su espesa piel, la cría reacciona y obrero rápidamente se sube a un árbol cercano.
Lentamente la cría retrocede en sus temblorosas patas. Parece desorientada. Es lógico. Inicialmente se dirige a la jungla pero luego cambia de dirección y va directamente al camión de la madre, en donde hay los reconfortantes olores que ha extrañado desde hace 24 horas. Pero pronto arranca hacia la jungla para lo que será una jubilosa reunión con su madre y una nueva vida en el Valle Babai.
Para Gyanwali, han sido dos días muy largos y ahora debe regresar a Chitwan para volver a las capturas. Pero en la cara se le nota su satisfacción por otro traslado exitoso.
"¡Caray!" exclama, con una ancha sonrisa. "Nada es mejor que esto. Es increíble saber que uno está contribuyendo a la conservación de una especie en peligro de extinción como el rinoceronte."
En Chitwan, el Dr. Swoyambhu Man Amatya, Direcdtor General del Departamento Nepalés de Parques Nacionales y Conservación de Vida silvestre, también está complacido por el éxito de la operación. "Cuando comenzamos en 1986, estábamos extremadamente cautelosos por los problemas de trasladar a cualquier animal, pero hoy se considera una operación normal y nos encontramos animados acerca de la posibilidad de mover otras especies."
Gracias a esta operación, la población actual del Real Parque Nacional Bardia es de 100 animales, número mínimo para una población viable, recomendado por el Grupo Especialista del Rinoceronte Asiático, un panel experto de científicos. El traslado de 10 rinocerontes este año será el último para Bardia por ahora.
Pero eso no implica que el trabajo haya terminado. Es esencial monitorear a los rinocerontes por medio del collar radiotransmisor para medir el éxito — o el fracaso — del programa de traslado, dice Gopal Upadhyay, Jefe Guardabosque del Real Parque Nacional Bardia. "Es una inversión para el futuro. Necesitamos un sistema permanente de continuo monitoreo para registrar los cambios en la población y el hábitat, y obtener información para el equipo gerencial."
El parque también está mejorando su capacidad para luchar contra el cazador ilegal — amenaza constante para la sobrevivencia de rinocerontes así como tigres y otros grandes mamíferos de la región.
Los traslados continuarán. El próximo sitio escogido es la Real Reserva de Vida Silvestre en el extremo rincón sudoeste de Nepal. Los científicos primeramente deberán asegurarse que esta pequeña área protegida puede soportar una población grande. Ya se han comenzado los estudios de factibilidad para ver si se puede establecer allí una población de reproducción.
Al final de cuentas, el futuro de los rinocerontes en el Nepal está mucho más segura que hace 40 años — algo de que pueden enorgullecerse los nepaleses. "El éxito de este programa es testimonio de la habilidad innata de los conservacionistas nepaleses," dice el Dr. Chandra Gurung, el Representante en Nepal del WWF. "Han merecido la admiración de colegas en todo el mundo por el traslado de estos rinocerontes sin una sola pérdida a pesar de la difícil agitación política y social."
*Lee Poston es Gerente Senior de Comunicaciones en el WWF-US
Mayor informacion
Los grandes rinocerontes de un cuerno
Los grandes rinocerontes de un cuerno, o rinocerontes indios, (Rhinoceros unicornis) antaño deambulaban desde Pakistán, por el norte de la India, hasta Nepal, Bhutan y la frontera con Birmania, y tal vez el sur de la China, habitando los humedales así como bosques y pantanos adyacentes. Hoy quedan confinados a pequeñas poblaciones protegidas en la India y el Nepal, con un total de unos 2.100 animales. Su distribución queda restringida por modificación de hábitats, tales como áreas cultivadas, pastaje y boscaje modificado.
La especie se considera en peligro de extinción por la Lista roja de Especies en Peligro de Extinción de la Unión Mundial Conservacionista.
El Arco Terai
Situado a la sombra de las Himalayas, el Arco Terai cubre 5 millones de hectáreas desde el Río Bagmati en el Nepal hasta el Río Yamuna en la India en el Oeste. Es un hábitat crítico de los grandes rinocerontes de un cuerno, reales tigres de Bengala, elefantes asiáticos, 80 otras especies de mamíferos, 47 especies de reptiles y anfibios, 556 especies de aves y más de 2.100 especies de plantas. Es también hogar de más de 6 millones de personas que dependen de sus recursos para su sustento e incluye cuatro áreas protegidas en el Nepal: Reserva de Vida Silvestre Parsa, el Real Parque Nacional Chitwan, el Real Parque Nacional Bardia, la Real Reserva de Vida Silvestre Suklaphanta. El Arco Teral forma parte de la ecoregión Terai Duar de Sabanas y Praderas, una de las ecorregiones del Global 200 del WWF — una clasificación global de base científica de los hábitats biológicamente más sobresalientes en el mundo, regiones en donde el WWF concentra sus esfuerzos.
El trabajo del WWF en el Arco Terai
En el programa Paisaje del Arco Terai del WWF en Nepal, el WWF y sus asociados trabajan para restaurar y reconectar once de los parques nacionales en el Nepal y la India para crear un paisaje continuo del Arco Terai. El trabajo incluye conservación de especies, despertar la conciencia, generar ingresos y capacitación.
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The geographical designations given here do not imply the expression of any opinion whatsoever on the part of WWF concerning the legal status of any country, territory, or area, or concerning the delimitation of its frontiers or boundaries.