Un año después, la marea sigue
Posted on noviembre, 06 2003
Análisis ambiental y socioeconómico del desastre del Prestige
WWF/Adena ha presentado hoy, en sendas ruedas de prensa en Madrid y Londres, su informe de evaluación del desastre del Prestige un año después. En este documento, la organización analiza las repercusiones ambientales, económicas y legales de esta marea negra e incide sobre todas las incógnitas que aún están por resolver.
WWF/Adena insiste en la necesidad de que se inviertan más fondos en investigar los impactos del vertido a largo plazo y de que exista una coordinación de los expertos para establecer prioridades de actuación. Asimismo, demanda más transparencia a la hora de comunicar estos efectos a la población.
Con motivo de cumplirse el primer año tras la catástrofe del Prestige, WWF/Adena ha lanzado su informe, “La marea sigue”, en el que se analizan las repercusiones ambientales, económicas y legales de un vertido que ya se está considerando como la peor marea negra de la historia tras la protagonizada hace más de una década por el Exxon Valdez en Alaska, a pesar de los mensajes triunfalistas del gobierno español.
Más de 64.000 toneladas de fuel vertidas finalmente –un 60% más de lo estimado inicialmente-, de las que entre 5.000 y 10.000 se encuentran todavía a la deriva y periódicamente alcanzan la costa, 13.000 que permanecen en el barco hundido, más de 3.000 km de litoral afectado, unas 30.000 pescadores afectados, son algunos de los datos destacados.
Aunque un año es un periodo corto de tiempo para describir con detalle los cambios ecológicos que ha podido suponer esta marea negra, lo cierto es que la recuperación de los ecosistemas gallegos requerirá para completarse entre un bienio y más de una década según la acción de las mareas, cantidad de fuel, tipo de sedimento o estructura ecológica de la zona afectada.
Los hábitats costeros, incluyendo los terrestres, han sido los más dañados, debido a las operaciones de limpieza (destrucción de dunas, apertura indiscriminada de pistas etc.), aspecto con el que WWF/Adena fue especialmente crítica durante la crisis.
Así mismo, hasta el momento se ha averiguado que una cantidad no conocida de fuel ha ido a parar a los fondos marinos someros de la costa, áreas de desove para numerosas especies de interés comercial y vía de entrada de contaminantes toxicológicamente nefastos como algunos Hidrocarburos Aromáticos Policíclicos (HAPs) más persistentes.
Debido a las características del fuel del Prestige, altamente viscoso e insoluble, es predecible una degradación lenta, por lo que se convertirá en una fuente prolongada de contaminación en los fondos donde se ha acumulado.
Por acción de factores fisicoquímicos y biológicos, los expertos coinciden en que sufrirá una serie de modificaciones que pueden aumentar su biodisponibilidad y toxicidad inicial, y en consecuencia, incrementarán el riesgo de bioacumulación en la cadena trófica.
WWF/Adena cree necesario realizar una cartografía de presencia de fuel en las zonas más sensibles para conocer la necesidad de posibles acciones a fin de neutralizar su efecto y estudiar su evolución.
También se ha constatado un fuerte impacto sobre la vegetación de las zonas costeras, especialmente de las comunidades de líquenes, que están muriendo en numerosos tramos por efecto de los vapores de agua marina contaminada.
Igualmente, ya se ha observado la desaparición de cinturones de algas de diversas especies.
A este respecto, WWF/Adena se muestra muy preocupada por el desinterés demostrado por las administraciones en apoyar la investigación científica en relación a las consecuencias, a pesar de ser una información imprescindible para diseñar líneas futuras de trabajo.
WWF/Adena denuncia que escasea la financiación para estos proyectos y, tras un año, no se están coordinando los estudios en marcha, ni optimizando el intercambio de información o de los resultados obtenidos.
El total de inversión dirigida a este tipo de análisis no alcanza los 10 millones de €, cuando en el estudio de los impactos del Exxon Valdez se invirtió 30 veces más.
Pero increíblemente, el gobierno español ha destinado 12.500 millones de € para el denominado Plan Galicia, un supuesto plan de regeneración ambiental que en realidad podría significar la “degeneración” ambiental definitiva para Galicia, dado que el 80% del presupuesto se destinará a proyectos de grandes infraestructuras.
Como agravante, cabe citar la falta de transparencia informativa que ha imperado en la catástrofe.
Tal es el caso de las imágenes de los fondos abisales de las inmediaciones del pecio o de la montaña submarina del Banco de Galicia, que han sido, según denuncian los científicos, ocultadas por el Comité Científico Asesor nombrado por el Gobierno para el seguimiento del Prestige.
En cuanto a los impactos económicos, hay que señalar que en algunas cofradías las capturas se han reducido en un 80 por ciento en relación con el pasado año.
Así mismo, se ha generado una especial preocupación por dos pilares de la economía gallega: el percebe y el mejillón.
En el caso del percebe, se han observado problemas de fijación de las larvas en las rocas, lo que compromete la producción futura de este recurso.
Sobre el mejillón, insistir en que los hábitats del mejillón salvaje, la semilla para mejillón de batea, se han visto fuertemente afectados por el fuel, lo que también puede tener repercusiones negativas en próximos años.
Entre las cuestiones legales, WWF/Adena quiere resaltar los avances logrados durante este último año.
De hecho, define como diligente la actuación española en lo que a legislación se refiere, ante el accidente del buque, subrayando dos efectos positivos.
Por un lado, la incorporación al Derecho interno de normas que, sin el accidente, habrían tardado años en ser asumidas.
Por otro, el liderazgo a escala comunitaria de cuestiones como la retirada de los monocascos, la propuesta de declaración de las costas gallegas como Área Marítima Especialmente Sensible (AMES) por la Organización Marítima Internacional (OMI).
En cualquier caso, aún quedan materias de importancia por resolver, entre ellos, los pabellones de conveniencia, la adecuada aplicación de la normativa creada y la necesidad de un régimen de responsabilidad ilimitada para el transporte de sustancias peligrosas.
Además, WWF/Adena es consciente de que a medida que disminuye la presión social o la atención de las ONGs se corre el riesgo de que se ralentice el ritmo de las reformas o incluso de que éstas se estanquen.
Según José Luis García Varas, Responsable del Programa Marino de WWF/Adena: “Tras haber sufrido cinco mareas negras en las tres últimas décadas, Galicia no puede desaprovechar su experiencia acumulada y capacidad de investigación marina. Por tanto, es fundamental que en esta ocasión se realice un amplio y coordinado análisis de las repercusiones a largo plazo de esta marea negra, estudio que desgraciadamente no se produjo en anteriores vertidos” y añade para finalizar: “Hasta ahora, han sido los desastres ocurridos en países como Reino Unido, Francia o Estados Unidos los que, con diferencia, han aportado más conocimientos sobre los efectos de la contaminación por hidrocarburos en el mar, y esto ha de cambiar”.
Más información:
José Luis García Varas, responsable del Programa Marino de WWF/Adena, tel.: +91 354 05 78/ 690 32 45 40
Coral García Barón, Prensa WWF/Adena, tél. +91 354 05 78/ 609 34 68 38
Enlaces relacionados