Sin un acuerdo sólido sobre financiación en la COP16 en Roma, la lucha contra la pérdida de biodiversidad estaría en peligro

Posted on febrero, 25 2025

Del 25 al 27 de febrero, los delegados se reunirán en Roma para retomar cuestiones clave que quedaron pendientes en la primera parte de la COP16, celebrada en Colombia el pasado mes de octubre. La reunión en Roma ha adquirido un alto perfil político, lo que podría ser clave para avanzar en las negociaciones.
Las negociaciones en la primera parte de la COP 16 en Colombia se vieron interrumpidas tras un cierre maratoniano y fueron suspendidas por la presidenta de la cumbre, Susana Muhamad, ante la falta de acuerdo para tomar decisiones. Con la participación confirmada de varios ministros, la reunión en Roma ha adquirido un alto perfil político, lo que podría ser clave para avanzar en las negociaciones.

La primera parte de la COP16 logró un acuerdo histórico con la creación de un nuevo fondo global -el Fondo Cali- dedicado a compartir los beneficios derivados del uso de información de secuencias digitales de recursos genéticos. En esta segunda parte de la Cumbre, el principal desafío será adoptar una estrategia de movilización de recursos para los próximos 5 años que garantice una financiación equitativa y efectiva para desarrollar el Marco Global de Biodiversidad. Hasta ahora, el debate se ha centrado en la creación de un nuevo fondo específico bajo la Convención sobre Diversidad Biológica de la ONU, ante las preocupaciones de los países del sur global sobre la gobernanza del actual Fondo para el Medio Ambiente Mundial y su capacidad para proporcionar recursos suficientes y adecuados.

Kirsten Schuijt, directora general de WWF Internacional, advierte que el mundo no puede permitirse el lujo de frenar el progreso en biodiversidad. "El Marco Global de Biodiversidad no es solo un conjunto de aspiraciones: es nuestra hoja de ruta hacia un futuro más sostenible y equitativo. No podemos permitir que se nos escape de las manos. El mundo necesita avanzar, no enfrentarse a nuevos obstáculos que frenen compromisos ambientales críticos”.

Los países deben llegar a Roma con una verdadera voluntad política de diálogo y cooperación, pues la crisis de biodiversidad tendrá consecuencias aún más profundas de lo que se comprende en la actualidad.

"Los países deben construir juntos un camino sólido, justo y bien financiado hacia las metas de biodiversidad para 2030. Si no se trabaja en conjunto, corremos el riesgo de no llegar nunca”, agregó Schuijt.


La urgencia de actuar: biodiversidad y economía en riesgo

En 2025, más de 900 líderes mundiales de empresas, gobiernos, academia y sociedad civil situaron la pérdida de biodiversidad y el colapso de los ecosistemas entre los cuatro riesgos globales más graves para las economías y sociedades en la próxima década.

Mientras tanto, nuestro Informe Planeta Vivo 2024 reveló que las poblaciones de vertebrados han disminuido en promedio un 73 % desde 1970, mientras que la crisis climática sigue devastando comunidades y ejerciendo una presión creciente sobre los ecosistemas.

"Todos los caminos pueden llevar a Roma, pero si queremos alcanzar las metas de biodiversidad para 2030, hay baches importantes que debemos reparar en el trayecto", advirtió Guido Broekhoven, director de Investigación y Desarrollo de Políticas de WWF. "Ya estamos en 2025: estos compromisos deben cumplirse de manera urgente”.

Asimismo, Broekhoven recordó que los países del sur global deben recibir al menos 200 000 millones de dólares anuales para 2025, además de la reasignación de 500 000 millones de dólares en subsidios perversos para la naturaleza. También subrayó la necesidad de garantizar acceso directo a estos fondos para los pueblos indígenas y comunidades locales, quienes cumplen un papel clave en la conservación de la biodiversidad.


Un papel clave para los pueblos indígenas

El reconocimiento y liderazgo de los pueblos indígenas y comunidades locales es un tema central en la COP16. Sus derechos están reflejados en la Meta 22 del Marco Global de Biodiversidad y son una prioridad para la presidenta de la cumbre, Susana Muhamad.

A pesar de su reciente renuncia como ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Colombia, tras una reestructuración del gabinete, se espera que Muhamad continúe en su rol como presidenta de la COP16 durante las reuniones en Roma.

"La Presidencia de la COP16 ha demostrado liderazgo, ambición y compromiso alcanzando consensos. Ahora, la cumbre debe cerrar con decisiones concretas sobre financiamiento y definir los mecanismos de seguimiento. Estamos en un momento clave: los países deben reafirmar su compromiso con la biodiversidad. No hay tiempo que perder", Sandra Valenzuela, directora ejecutiva de WWF Colombia.


¿Qué se ha logrado y qué sigue pendiente?

Durante la primera parte de la COP16 en Colombia, se lograron avances importantes como:
  • El establecimiento del “Fondo Cali”, que se espera lanzar en Roma, para movilizar fondos de empresas que utilizan información genética digital.
  • La creación de un Órgano Subsidiario para Pueblos Indígenas y comunidades locales
  • Una esperada decisión sobre la identificación de Áreas Ecológicas o Biológicamente Significativas en los océanos.

Sin embargo, varios acuerdos críticos siguen estancados debido al bloqueo en la financiación. Entre ellos:
  • Finalizar los indicadores de monitoreo para evaluar cómo los sectores clave están integrando la biodiversidad en sus estrategias.
  • Definir el proceso para aumentar la ambición en la COP17 tras la Revisión Global del progreso.
  • Establecer cómo la Convención sobre la Diversidad Biológica de la ONU coordinará con otros acuerdos multilaterales.

Con la cuenta atrás hacia 2030 en marcha,advertimos que la COP16.2 en Roma es un punto de inflexión: sin un acuerdo sólido sobre financiación, la lucha contra la pérdida de biodiversidad estaría en peligro.
 
WWF en la COP16 de Colombia, el año pasado
© WWF